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Omega 3: su importancia en la prevención cardiovascular.

El Omega 3 es un ácido graso poliinsaturado, esencial. Es decir, que nuestro cuerpo no lo produce y por eso debemos incorporarlo con la dieta. Está presente en vegetales, semillas, frutos secos, aceites de pescados, mariscos y crustáceos.

 

Existen 3 tipos de ácidos grasos Omega 3. En su disponibilidad, radica la importancia de la dieta:

Ácido Alfa Linolénico (ALA), Ácido Docosa Hexaenoico (DHA) y Ácido Eicosa Pentaenoico (EPA).

 

Aunque los tres son Omega 3, hay diferencias notables entre ellos:

 

  • El ALA es el único que se encuentra en pequeñas cantidades en vegetales (soja, linaza y canola), frutos secos y semillas (chía y lino). Este ácido graso, al llegar al cuerpo, “se oxida” y se quema para obtener energía. Sólo menos de un 5% del total se convierte en EPA y una pequeñísima parte se convierte en DHA.

 

  • El EPA y DHA son aceites exclusivos de pescados. Principalmente, de pescados azules de agua fría, mariscos y crustáceos. Los de mayor contenido son: salmón rosado, arenque, caballa, bacalao, sardinas, trucha, anchoas y atún. Así como también: ostras, cangrejo, camarones, calamares y mejillones. El EPA es muy importante para la salud del corazón, gracias a sus propiedades antiinflamatorias y anticoagulantes.

 

Beneficios de consumir Omega 3.

Se ha demostrado que favorecen en la protección de varias enfermedades, entre ellas:

  • Cardiovasculares: pueden prevenir arritmias, reducir el riesgo de trombosis, disminuir los niveles de triglicéridos, inhibir el crecimiento de placas ateroescleróticas, mejorar la función endotelial vascular y disminuir la presión arterial.
  • Inflamatorias: artritis reumatoide, colitis ulcerosa, dermatitis atópica y psoriasis.
  • Osteoporosis: retardan la pérdida de masa ósea.
  • Neuropsiquiátricas: depresión, psicosis y Alzheimer.

 

La naturaleza nos brinda todos los nutrientes necesarios para un mejor funcionamiento de nuestro cuerpo. Al conocer los beneficios que nos brindan y de qué alimentos obtenerlos, no debemos olvidar incluir a los fantásticos Omega 3.

 

Ante cualquier duda, no dejes de consultar a tu especialista de confianza.

 

Raquel Medina.

Médica Clínica y Nutricionista especialista en Obesidad.

M.N. 105298

 

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