La celiaquía es definida como un desorden sistémico con base autoinmune, causado por la ingesta de gluten en personas genéticamente predispuestas.
El modo de presentación es muy variado y si bien no existen grados de celiaquía, podemos clasificarla según sus síntomas y formas de presentación: celiaquía asintomática o subclínica, celiaquía clásica o sintomática, celiaquía potencial, celiaquía latente y celiaquía refractaria.
La celiaquía refractaria es la forma más grave, aunque afortunadamente, muy poco frecuente. Se da en pacientes que no obtienen mejoría a pesar de llevar a cabo dieta Libre de Gluten de manera estricta. Se estima que lo padecen aproximadamente el 0,5% de las personas diagnosticadas.
Es muy importante reconocer este tipo de variante de la celiaquía, ya que algunos pacientes pueden desarrollar graves dolencias secundarias.
Hay algunos indicios que pueden significar sospecha de celiaquía refractaria como puede ser la persistencia de síntomas extradigestivos o digestivos o la evidencia de nueva atrofia de las vellosidades tras al menos 12 meses luego de haber comenzado con la dieta Libre de Gluten estricta.
Podemos hablar de dos tipos de celiaquía refractaria:
-Tipo I: este tipo de celiaquía refractaria representa una enfermedad menos grave.
-Tipo II: el paciente requiere mayor control y muchas veces tendrá que someterse a medicación ya que en algunos casos, se puede llegar a desarrollar otras patologías asociadas. Es necesario señalar que en los últimos años se está trabajando de manera exhaustiva en la aplicación de tratamientos precisos y efectivos que suponen una clara mejora terapéutica para la forma más grave de enfermedad celíaca refractaria.
Consultá con tu médico de confianza siempre, ante cualquier duda o inquietud.
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Asociación Celíaca Argentina
